Lo que está sucediendo en el mercado de gas cada vez se parece más a un partida de Stratego. El tablero en estos momentos lo controlan muy pocos, y en el caso europeo, Rusia. La dependencia europea del gas ruso es total, pero Moscú está haciendo sufrir a los europeos más de lo debido, tanto que es posible que parte de la Unión Europea se quede sin suministro de gas este invierno si finalmente es muy duro.

Rusia no está suministrando a través de Ucrania todo el gas que debería. Por otro lado, el nuevo gasoducto que le une con Alemania, Nord Stream 2 parece no arrancar y tardará más de lo esperado. Gazprom juega al ratón y al gato con Europa. No te preocupes que arranco Nord Stream 2 y te soluciono el problema. Pero el abastecimiento no está siendo suficiente.

Según Citigroup, los inventarios de gas, el que hay que almacenar de cara al invierno, son los más bajos en una década y es más que probable que no se alcancen los niveles deseados para sobrevivir al invierno.

La caída del almacenamiento de gas se ha pronunciado este 2021 por el desvío de buques GNL a Asia, principalmente China, que no quiere sufrir lo vivido el año pasado con los problemas de suministro. Ellos sí están llenando sus almacenamientos, pero Europa no. Rusia también tiene parte de culpa, así como continuos problemas en la producción de GNL en EEUU u otros grandes productores como Noruega que están realizando labores de mantenimiento en sus plantas.

Según prensa especializada, se destaca esta frase de Harald Herzig, jefe de operaciones de la empresa de servicios públicos alemana Mainova. «Nos enfrentamos a una situación extrema este invierno con la amenaza de no tener realmente suficiente gas para los mercados de Europa Occidental».

Mientras tanto, el precio del gas no para de subir en los mercados europeos. No se libra nadie. El índice TTF de Países Bajos está en máximos históricos. Su precio para octubre cotiza en los 51,7 €/MWh. En el caso del Mibgas, el mercado ibérico, el gas es aún más caro, cerró ayer en casi 52 €/MWh pero superó los 53 €/MWh en la negociación de este martes.

La única solución a corto plazo es arrancar de una vez el gasoducto Nord Stream 2. Aunque sea un poco tarde, eso haría que se suavizaran los precios y que se llenen los almacenamientos de gas en buena parte de Europa. Eso sí, sería importante que ese suministro se hiciese antes de que Alemania cierre 4 GW de nucleares que tiene previsto hacer durante este otoño. Y ojo que también están las elecciones presidenciales de por medio.

La tensión es máxima en los mercados. Todo está a flor de piel, y encima es que se ha trasladado a los mercados eléctricos por la necesidad de producir electricidad a través de los ciclos combinados de gas. Récords de precios eléctricos en todo el Viejo Continente. Incluso los nórdicos están viéndose afectados por esta crisis en los mercados con su precio de la electricidad por encima de 100 €/MWh, algo nunca visto.

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